Hoy os descubrimos uno de los artes más conocidos dentro del mundo del café: el Latte Arte. Se trata de vaporizar o quemar la leche y verterla sobre un espresso con el objetivo de crear originales diseños encima del café. Aunque tiene varios nombres, como arte en café o arte barista, el título de Latte Arte es el más conocido de todos. Una creatividad que, muy a nuestro pesar, es literalmente consumida.
En 1980 el Latte Arte llegó a alcanzar una gran popularidad en las cafeterías de todo el mundo, aunque entonces solo los baristas profesionales eran capaces de hacer con la crema del café auténticas obras de arte. En realidad, no hay dibujo que se resista a la hora de hacer Latte Arte: corazones, flores, animales, personas… Aunque es un arte difícil al principio, con un poco de práctica cualquier persona puede acabar aprendiendo. Para empezar, se necesitan dos cosas: un shot de espresso y leche vaporizada. Hay que tener claro que el espresso actúa como un lienzo mientras que la leche actúa como el pincel y la pintura.
Hoy en día existen dos técnicas principales para hacer Latte Arte: vertido y etching. El vertido consiste en verter la leche vaporizada desde la jarra dentro de la taza de espresso, mientras que con los movimientos de muñeca y manos se va controlando la forma y la figura final. El etching requiere de más habilidades técnicas y talento artístico. Consiste en dibujar sobre el café directamente con la ayuda de diferentes herramientas.
¿Os gustaría aprender a hacer Latte Arte?