Cuando en el 2001 Jordi Gabarrell decidió abrir el primer restaurante Cullera de Boix, en la Ronda Sant Pere de Barcelona, tenía claro que quería hacer un restaurante cafetería que siguiera la tradición de las antiguas ‘casas de comer’ catalanas. Aquellas fondas que abrían de 7 de la mañana a 12 de la noche y donde servían comida casera con una buena cerveza, vino y café. Catorce años más tarde, aquella idea inicial ha resultado todo un éxito, permitiéndole abrir dos locales más en la ciudad de Barcelona. Concretamente situados en la calle Hospital y en Rambla Catalunya.
Si hay alguna especialidad que caracterice a Cullera de Boix son los arroces. “Es una comida popular, saludable y que invita a tomarlo en comunidad”, comenta Gabarrell. No por nada, en todos los menús de mediodía hay la opción de comer arroz, ya sea de verduras o de bacalao, que proviene del Molí de Rafelet del Delta del Ebro.
En cuando al café, desde el verano de 2015 Cullera de Boix se ha pasado al Premium Original y Premium Bourbon de Café Saula. “Queríamos apostar por un producto catalán y de proximidad”, dice Gabarrell, quien especifica como “Barcelona siempre ha tenido una gran tradición de buenos torrefactores y creemos que se tienen que potenciar”. Según el propietario, Café Saula es un producto “muy equilibrado, de buena calidad y de paladares exigentes”.
Desde Café Saula agradecemos este elogio y confianza en nuestro producto. Estamos encantados de poder seguir trabajando para ofrecer el mejor café a nuestros clientes!