Económica, fácil de usar y muy resistente. La cafetera italiana tiene un sinfín de cualidades que la convierten en un utensilio indispensable en la mayoría de hogares.
Eso sí, para saborear un buen café, es imprescindible que la cafetera italiana esté correctamente limpia. Aunque hay cierta disparidad de opiniones a la hora de limpiar la cafetera italiana, desde Café Saula os dejamos algunos consejos que pueden ser de mucha utilidad:
1 – Desmontar la cafetera
Para empezar, hay que separar todas las partes de la cafetera y vaciarla de restos de café, así como los posos del filtro. Tampoco hay que olvidarse de separar la goma que une la parte superior del cacillo del filtro.
2 – A mano o lavavajillas?
Así como el lavado a mano es apto para todas las cafeteras, no es así con el lavavajillas. Sólo algunas cafeteras italianas de acero inoxidable son aptas para poner dentro del electrodoméstico. Y aunque fuera el caso, siempre hay que separar todas las piezas de la cafetera y ponerlas por separado dentro del lavavajillas.
3- Poner en remojo
Si se prefiere el lavado a mano, no habrá diferencias entre las cafeteras de aluminio o de acero inoxidable. Eso sí, ambas se pueden rayar muy fácilmente, por lo que es importante no usar productos abrasivos. Lo ideal es dejar todas las partes separadas en remojo con agua caliente y un poco de jabón durante unos minutos. Es la mejor forma para ablandar la suciedad y que luego sea más fácil retirarla sin frotar demasiado.
4- Recipiente inferior
Esta pieza, que es donde se pone el agua para preparar el café, se limpia fácilmente con un poco de agua tibia y jabón. Si la base exterior está quemada por el contacto con el fuego del gas, se puede sumergir en un recipiente con agua y vinagre a partes iguales, una cucharada de bicarbonato y calentar hasta que hierva. Tras unos minutos de reposo, las partes quemadas se desprenderán más fácilmente.
5- Cacillo del filtro
Es la pieza en forma de embudo donde se coloca el café molido. Un lugar donde suelen quedar restos de café muy fácilmente. Para limpiarlo bien, además de frotar con agua tibia y un poco de jabón, podemos golpear ligeramente la base del filtro con un cepillo para que se desprendan los posibles restos de café que puedan quedar. También hay que limpiar la goma con agua y jabón, pero sin frotar demasiado. En el caso que tenga un color verdoso, grisáceo o amarillento, hay que substituirla por una nueva.
6- Filtro superior
Este filtro va unido a la goma y es fundamental porque impide que los posos de café se mezclen con la infusión. Por eso, hay que limpiarlo bien con un cepillo para que no queden restos de café que puedan obstruir el proceso.
7- Parte superior
Aquí es donde se recibe el café recién hecho, por lo que hay que tener especial esmero en la limpieza y dejarlo un poco más de tiempo en remojo antes de frotarlo con agua y jabón. Para poder limpiarlo bien por todos los recovecos, un truco es usar un cepillo de dientes únicamente para este fin.
8- Secado
Por último, y no menos importante, hay que secar cuidadosamente cada pieza de la cafetera antes de volverla a montar. Si quedara cualquier resto de jabón en alguna de las partes provocaría un mal sabor en el café. Lo ideal es dejar que las piezas se sequen al aire.