Cualquier amante del café sabe que para saborear un buen café no sólo basta con tener un producto de la máxima calidad, sino que hay que saberlo conservar adecuadamente en todo momento. No olvidemos que el café es la semilla de un fruto y con el tiempo va perdiendo toda su esencia y sus propiedades. Por lo tanto, su conservación es un factor básico en el resultado final. Os dejamos algunos métodos muy sencillos para conservar el café sin perder sus propiedades:
1: Conservar el café en la nevera
El calor y la humedad son dos grandes enemigos a la hora de conservar los granos de café, ya que se oxidan y les resta gran parte de su aroma y sabor. De hecho, la temperatura del grano de café nunca debería exceder de los 20º. Por eso, la nevera es una gran aliada para conservar el café adecuadamente.
2: Proteger el café cerrado herméticamente
Pero no solo es importante guardar el café en la nevera, sino que también es indispensable mantener el café en un recipiente cerrado para evitar el contacto con el oxigeno. Lo ideal es dejarlo dentro de uno de nuestros envases de lata de 250 gramos o en un tupper cerrado herméticamente.
3: Moler el café en el momento
Aunque moler el café en casa no es muy frecuente, los más sibaritas suelen contar con un pequeño molinillo de café para sus ocasiones especiales. Se trata de una muy buena manera de conservar la esencia del café, ya que el café molido suele conservarse mejor que el café en grano.
¡Desde Café Saula esperamos que estos sencillos métodos para conservar el café os hayan sido de utilidad!